Este texto describe el proceso para obtener y interpretar la Estructura de Costos (EC) de una empresa, así como su importancia para la gestión empresarial.
Para calcular la EC, primero se definen los conceptos de costos fijos y variables, luego se identifican todas las áreas o departamentos de la empresa y se determinan los costos fijos y variables asociados a cada una. Posteriormente, se calcula la proporción de los costos fijos y variables con respecto al costo total en cada área. Finalmente, se suman todos los costos fijos y variables de la empresa y se aplican las fórmulas correspondientes para obtener la representación de los costos fijos y variables sobre el total de costos de la empresa.
La interpretación de los resultados de la EC permite comprender qué porcentaje de los costos totales de la empresa corresponde a costos fijos y cuál a costos variables. Una mayor proporción de costos variables no garantiza necesariamente una mayor competitividad, pero indica una mayor capacidad de adaptación a cambios en el entorno empresarial. Además, una estructura con más costos variables puede alcanzar más fácilmente el punto de equilibrio, donde los ingresos igualan los costos, debido a la menor presión sobre los costos fijos.
Es importante realizar comparaciones entre diferentes momentos en el tiempo o entre empresas similares para interpretar adecuadamente los resultados de la EC. Además, cualquier cambio en la estructura de costos debe estar respaldado por una justificación sólida y una comprensión de la realidad del sector y de la empresa en particular.
En resumen, la EC proporciona información valiosa para la gestión empresarial al ayudar a comprender la distribución de los costos fijos y variables, lo que permite una mejor planificación financiera y una mayor capacidad de adaptación a los cambios del entorno.
OBTENCIÓN DEL INDICADOR
Entendemos por Estructura de Costos a la distribución de costos fijos y variables en el modelo de negocio. Aquellas empresas en las que existe una alta presencia de costos fijos, tendrán menor posibilidad de escalar o expandir su negocio debido a la posible fuerte inversión que deben realizar para poder satisfacer una demanda que crece de forma exponencial.
Para poder obtener la Estructura de Costos (EC) hacemos lo siguiente:
- Definimos el concepto de costo fijo y costo variable.
- Identificamos todas las áreas o departamentos de la empresa.
- Identificamos todos los costos fijos (por cada partida o concepto) y costos variables por cada área.
- Representamos la proporcionalidad del costo fijo y del costo viable con respecto al costo total. Así obtenemos la Estructura de Costos por área de la empresa.
- Sumamos por una parte todos los costos fijos (de todas las áreas) y por otra parte sumamos todos los costos variables (de todas las áreas).
- Realizamos la siguiente fórmula para obtener la Estructura de Costos de la Empresa:
- Representación de los Costos Fijos de la Empresa: Costos Fijos Totales / Costos Totales
- Representación de los Costos Variables de la Empresa: Costos Variables Totales / Costos Totales
INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS
La Estructura de Costos de la empresa nos permite conocer el porcentaje que representan los costos fijos y los costos variables sobre el total de la estructura de la empresa.
No podemos afirmar que cuanto mayor porcentaje de costos variables exista, la empresa es más competitiva, pero sí que las estructuras donde predominan los costos variables tienen mayor capacidad de adaptación a cambios en el entorno. Por otro lado, pueden alcanzar los puntos de equilibrio más fácilmente, ya que el margen de contribución, es decir, la utilidad por unidad vendida, debe realizar un menor esfuerzo para cubrir los costos fijos de la empresa.
En este sentido, al igual que en otros indicadores anteriores, los resultados sin un valor de referencia, nos arrojarían muy poca información. Por ello, su interpretación debe realizarse haciendo una comparación entre dos momentos: el momento original (aquel en el que no se ha tomado ninguna acción para mejorar la estructura actual de costos fijos), y el momento mejorado o final (aquel en el que se ha tomado acciones para reducir la estructura de costos fijos).
De cualquier modo, este indicador ayudaría a la escalabilidad y la adaptación a los cambios en el entorno, pero los cambios en la estructura de costos de la empresa, deben estar fundamentados, justificados y supeditados a la interpretación y sensibilidad que tenga el empresario sobre la realidad del sector, y de su propia empresa.
